El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (Pniec), cuya remisión a Bruselas aprobó ayer el Consejo de Ministros, prevé que la potencia eólica instalada se duplique del 2015 al 2030 y que la solar fotovoltaica se multiplique por nueve, mientras que la nuclear se reduciría a más de la mitad.

Según las previsiones del Gobierno, la energía eólica pasará de una potencia instalada de 22.925 MW en el 2015 a 50.528 MW en el 2030, y la solar fotovoltaica de 4.854 MW a 36.882 MW, mientras que la solar termoeléctrica pasa de 2.300 MW a 7.303 MW.

La nuclear, para la que está previsto un cierre ordenado por orden de antigüedad, por el que ninguna cerrará antes del 2025 y la última no después del 2035, pasará de 7.300 MW instalados en 2015 a 3.181 en 2030. El Pniec prevé que las centrales que usan carbón como combistible dejen de aportar energía al sistema como tarde en 2030.