La opinión de los expertos es unánime. Antes de acometer la gigantesca obra de restauración de Notre Dame hay que garantizar la estabilidad de la catedral, hacer un diagnóstico completo de los daños provocados por el fuego y protegerla de los avatares meteorológicos.

Varios días después del incendio que destruyó la cubierta y su famosa aguja de 94 metros, el edificio tiene varios puntos débiles. El que más preocupa es el frontispicio norte. Pero, además, la previsión indica que el sol que luce estos días en París dejará paso a la lluvia a partir del martes.

Añadida al agua que se empleó para extinguir las llamas, el mal tiempo podría complicar mucho las cosas, dado que el siniestro ha dejado varios boquetes en el techo a la altura de la nave central y del transepto. Por eso se ha optado por cubrir el edificio con una lona, una especie de “gran paraguas” para resguardarlo de la lluvia y proteger la cúpula.

Según adelantó el ministro de Cultura, Frank Riester, la instalación de la lona se hará rápidamente y el encargado de realizar esta primera intervención será el arquitecto jefe de Notre Dame, Philippe Villeneuve.

La lona tendrá la forma de un techo puntiagudo, más alto que el que se llevó por delante el incendio y lo suficientemente grande para permitir a los obreros trabajar en la reconstrucción del armazón. Es el mismo sistema que se empleó en 2014 para renovar el Panteón.

Web falsa para recaudar fondos

Por otro lado, la Fundación del Patrimonio presentó este viernes una denuncia tras un intento de estafa por parte de unos individuos que, haciéndose pasar por miembros de la fundación, invitaban a hacer un donativo para la reconstrucción de Notre Dame.

“La Fundación alerta a los internautas de la existencia de una web de colectas fraudulenta para Notre Dame. La web siguiente es falsa: https://donfondation-patrimoine-sauvonsnotredame.weebly.com”, precisa en un comunicado. La fiscalía de París ya ha abierto una investigación para identificar a los autores del timo.