Hace unos meses se halló el torso. Ahora, la cabeza y las piernas. La policía danesa informó del hallazgo de estas partes del cadáver de la periodista sueca Kim Wall, desaparecida misteriosamente hace dos meses cuando entrevistaba al inventor danés Peter Madsen en su submarino.

Buzos de la Marina encontraron el viernes en aguas de la bahía de Køge, al sur de Copenhague, una bolsa con la ropa de Wall y un cuchillo, y otra con la cabeza y las piernas, ambas con trozos de metal en su interior.

El torso de Wall, que tenía 30 años, apareció flotando en el Báltico a finales del mes de agosto, casi dos semanas después de haber sido vista por última vez a bordo del Nautilus, el submarino de fabricación casera en el que iba a entrevistar a Madsen.

El inventor, de 46 años, ingeniero autodidacta, se encuentra en prisión preventiva con los cargos de homicidio y trato indecente con cadáver. El acusado asegura que es inocente pese a los indicios acumuladas en su contra.

DESAPARICIÓN // El 10 de agosto, cerca de Copenhague, Peter Madsen se embarcó en el Nautilus junto a Kim Wall. Por la noche, una compañera de la periodista, preocupada por no tener noticias de ella, alertó a la policía. Madsen fue detenido al día siguiente en el estrecho de Öresund, entre Dinamarca y Suecia, mientras, según las autoridades danesas, estaba hundiendo su submarino «deliberadamente».

La Fiscalía alega que Madsen asesinó a Kim Wall para satisfacer una fantasía sexual y luego mutiló su cuerpo, pero el inventor sostiene que Wall falleció en el interior de la nave al caerle de forma accidental la escotilla y que después de navegar sin rumbo y pensando en el suicidio varias horas, arrojó el cadáver por la borda, entero y con ropa.

DESCUARTIZADA // La hipótesis con la que trabajan las autoridades es que en las cuatro horas que el submarino estuvo sumergido en el Báltico la noche del crimen, Madsen descuartizó el cuerpo de la periodista y se deshizo de él.

De hecho, en la última vista ante los tribunales, la Fiscalía reveló que el torso de Wall presentaba 14 puñaladas en la zona del abdomen y que en el ordenador del inventor había vídeos de mujeres ejecutadas y torturadas, que él asegura que no son suyos.