Los servicios sociales del municipio de Carloforte, en la isla de Cerdeña (Italia), trabajarán para garantizar el bienestar de los hijos de Juana Rivas -que el lunes fueron entregados a su padre- con asistencia directa, apoyo psicológico y ayuda pedagógica y educativa, si fuera necesaria.

La asistente social de Carloforte, Carla Serra, explicó a la agencia Efe que la situación «es delicada por tratarse de menores» y rechazó entrar en detalles sobre cómo va a ser el procedimiento mediante el cual los servicios sociales atenderán a los hijos de Rivas y el italiano Francesco Arcuri. Serra, no obstante, indicó que, como en circunstancias similares, en estos casos los servicios sociales se ponen «a disposición de los tribunales» para evaluar la situación -valorar las condiciones de vida de los niños y elaborar un informe- y determinar el tipo de ayuda que van a brindar. A partir de octubre, los tribunales italianos iniciarán un proceso por el que se decidirá cómo se determina la custodia de los niños, informan medios locales.

Por otro lado, los familiares -padres y dos hermanos- de Rivas que ayer fueron citados por su presunta colaboración en la sustracción de los niños se acogieron a su derecho a no declarar ante el Juzgado de Instrucción número 2 de Granada, según explicó su abogado, Juan de Dios Ramírez.

Tras la citación, la fiscalía no pidió ningún tipo de medidas cautelares para ellos.