Agentes de los Mossos de Tarragona han intervenido 21 kilos de coca en abono orgánico en el marco de una operación llevada a cabo el 3 de diciembre en la que desarticularon una organización criminal dedicada al tráfico internacional de sustancias estupefacientes y acabó con tres detenidos.

La investigación comenzó a finales de verano, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de la existencia de un individuo que iba a crear un entramado empresarial con el objetivo de introducir partidas de droga a través de uno de los puertos de Mediterráneo.

Al mismo tiempo por parte de los Mossos se estaba investigando la persona que estaba organizando la compra de la droga en su origen y su posterior recepción en destino y que iba a utilizar el entramado de este primer individuo para la introducción de la partida posteriormente intervenida.

EQUIPO POLICIAL CONJUNTO

Al tener conocimiento de esta coincidencia los agentes de ambos cuerpos policiales crearon un equipo conjunto de investigación que tenía como objetivo la intervención de la sustancia y la detención de las personas relacionadas con los hechos. Fruto de la investigación conjunta se pudo averiguar que los investigados estaban preparando la importación de contenedores de los que, con origen desde varios lugares de América del sur y con destino a puertos del Mediterráneo, iban a transportar los cargamentos de droga por esta nueva organización criminal.

A mediados del mes de noviembre los investigadores tuvieron conocimiento del tráfico de un contenedor con origen en el Puerto de Buenaventura (Colombia) y con destino al Puerto de Valencia, con el que se iba a transportar el primer cargamento de droga planificado para este nuevo grupo camuflado entre abono orgánico.

LABORATORIO EN GERONA

Asimismo, los investigadores descubrieron que los responsables habría realizado gestiones para alquilar una nave industrial en un polígono industrial de la localidad de Vila-seca (Tarragona), con el fin de ser usada como lugar de carga para extraer la droga introducida. Igualmente, se pudo descubrir una vivienda en una localidad de Gerona en el que los investigados pretendían establecer posteriormente el laboratorio donde se tenía que extraer la sustancia estupefaciente que vendría mezclada con la carga de abono y llevar a cabo el proceso de cortar la droga con el objetivo de aumentar la cantidad y de esta manera generar más beneficios.

El 26 de noviembre en el puerto de Valencia se inspeccionó el primer contenedor importado por esta organización que podía contener la droga. Por este motivo fue sometido al reconocimiento del escáner y su posterior traslado al lugar de almacenamiento para un registro exhaustivo. De las pruebas realizadas se pudieron descubrir un total de 28 sacos de abono, con un peso total superior a una tonelada, que había sido mezclado con cocaína.

Una vez confirmado que se había encontrado droga se sustituyó y a pedir la correspondiente autorización para la entrega controlada de la mercancía para poder desarticular plenamente el entramado criminal.

DESARTICULACIÓN

El pasado 3 de diciembre el contenedor fue trasladado hasta la nave situada en la localidad de Vila-seca. En este momento ambos cuerpos policiales llevaron a cabo un operativo policial encaminado a la completa desarticulación del entramado criminal.

Se hicieron cuatro registros domiciliarios en las localidades de Barcelona, Salou, Riudarenes y Vila-seca durante los cuales se intervino otro saco de 40 kg de abono orgánico mezclado con cocaína. Por otro lado se detuvo a tres de los integrantes de la organización criminal y se tomó declaración a cuatro personas por los hechos investigados.

Los detenidos, tres hombres de nacionalidad dominicana y española, fueron puestos a disposición de la autoridad judicial, que decretó el ingreso en prisión para uno de ellos y libertad con cargos para el otro.