Italia sigue en cifras de pico aunque hay un ligero descenso del número de muertos y cierta estabilización de los contagios. El país contabiliza ya 15.887 fallecidos con coronavirus desde que se detectó el brote a finales de febrero, 525 más desde el sábado pero menos que el viernes, según el último balance oficial de Protección Civil, hecho público ayer. El número de contagios totales, contando enfermos, fallecidos y curados, es de 128.948 personas, lo que supone un incremento de 4.316 nuevos casos en 24 horas, unos 500 menos que el viernes. Sin embargo, se continúan realizando los test a la población.

Las personas actualmente positivas ascienden a 88.274, con lo que el número de positivos ha subido en 2.972 en un día (2.886 de ayer), y hay 21.815 curados, 819 más pero una cifra inferior a los 1.238 del sábado, aunque esta cifra puede sufrir el hecho de que las altas se pueden diferir en fin de semana. La mayoría de los fallecidos son personas que se contagiaron hace 10 o 15 días.

La estadística oficial señala también que la mitad de las víctimas se siguen produciendo en Lombardía, con 28.124 enfermos aún sin dar de alta. Otros 13.426 contagiados se consideran ya curados en la región de Milán y las ucis de los hospitales se han vuelto a abrir a pacientes con otras patologías ajenas al covid-19. Hasta ahora, otras enfermedades graves se derivaban a otras regiones menos afectadas.

Uno de los datos más esperanzadores es el descenso de pacientes ingresados en las ucis, que constituyen el mayor problema para el funcionamiento del sistema sanitario, que en muchas regiones del país se encuentran al borde del colapso. Desde que comenzó la pandemia de coronavirus en Italia, este dato había ido siempre en aumento, hasta el pasado sábado. Ayer se redujo el número de personas en las ucis. El viernes habían sido 4.068; el sábado, 3.994; y este domingo, la cifra total se redujo hasta los 3.977.