Al menos 250 personas fueron puestas en cuarentena y se les está haciendo pruebas para detectar el coronavirus en el norte de Italia, según informó Giulio Gallera, comisionado de salud de la región de Lombardía, quien explicó que además se pidió a miles de residentes de tres localidades que permanezcan en sus casas mientras las autoridades se esfuerzan en contener el brote. En un solo día se detectaron en el país transalpino 16 nuevos infectados, 6 de ellos en Codogno, una pequeña ciudad a unos 60 kilómetros al sudeste de Milán.

Además, en Novi Sanzhary, una pequeña ciudad de provincias en el centro de Ucrania, se mantuvieron duros enfrentamientos con la policía local en protesta por el confinamiento de repatriados en unas instalaciones próximas. Los autobuses de evacuados fueron atacados a pedradas pese al despliegue de seguridad.