La lluvia de barro sorprendió ayer a los ciudadanos de la provincia de Castellón y de otros puntos de la península.

La presencia de calima, con la entrada de aire cálido procedente de África causante del aumento esos días de las temperaturas, ha arrastrado masas de aire acompañadas de partículas de polvo del desierto sahariano, que al mezclarse con agua produce barro, explicó la meteoróloga Mar Gómez, de la plataforma Eltiempo.es.

Ayer tarde estaban previstas estas tormentas con barro en Pirineos, sistema Ibérico, zonas de montaña sobre todo de Cuenca y Guadalajara, sistema central, Navarra, interior de la Comunitat Valenciana y La Rioja, y Aragón.

Por otra parte, las altas temperaturas registradas durante la primera ola de calor “oficial” del verano, que obligó a decretar la alerta naranja en una veintena de provincias, remite aunque seguirán siendo elevadas en todo el país. H