El fin de semana posterior a la muerte y descuartizamiento de Marta Calvo, su presunto homicida lo pasó en compañía de su madre, quien acudió desde Mallorca a València la noche del 8 de noviembre para pasar un par de días junto a su hijo y celebrar su 37 cumpleaños.

Supuestamente, según la versión sostenida por el detenido, a quien se investiga por su relación con otras dos muertes de mujeres tras suministrarles cocaína, él ya se había deshecho de los restos mortales de la joven de Estivella tras arrojarlos en bolsas de basura a varios contenedores antes de que llegara su madre, pero los investigadores tratan de averiguar hasta qué punto habría podido ayudar una madre a su hijo en la eliminación de pruebas que lo incriminen en un delito más allá de la profanación de cadáver.

Desde el primer momento la mujer, de 56 años y nacionalidad colombiana, se mostró colaboradora con los agentes, quienes le tomaron declaración el pasado 19 de noviembre, una vez centradas las pesquisas en Jorge Ignacio P. J. gracias a la geolocalización que envío la propia víctima a su madre desde la casa de Manuel alquilada por Jorge P. J. la noche en la que se citó con su presunto homicida en esa vivienda.

investigación // No obstante, la madre del sospechoso ocultó a los investigadores en este primer interrogatorio que ese fin de semana que pasó junto a su hijo se llevó a Mallorca unas prendas de ropa de Jorge P. J. y dos dispositivos electrónicos, entre ellos la tableta personal. Según ella, estaban en la vivienda que éste tenía alquilada en l’Olleria, donde pasaron ambos las noches del 8 y del 9 de noviembre.

De hecho, la mujer asegura que a la casa que tenía su hijo en Manuel -donde se cometió el presunto crimen- ni siquiera llegó a entrar, ya que únicamente fueron el domingo por la noche a esa localidad para pagar la mensualidad del alquiler. No fue hasta trece días después cuando la progenitora admitió la existencia de estos objetos de su hijo que se había llevado después de su visita a l’Olleria y que «por olvido» no había dicho nada antes. Concretamente se trataba de un iPad, un router, un jersey negro y una camiseta de manga corta blanca.