El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ordenó ayer a la Dirección General de la Guardia Civil retirar el borrador de orden general con el que pretendía regular el atuendo y el comportamiento de los agentes y que, entre otras medidas, prohibía los tatuajes y fumar durante el servicio. El titular del área, según fuentes del ministerio, pidió que se redacte otro texto por el necesario acuerdo mayoritario de las asociaciones del instituto armado.
Las mismas asociaciones anunciaron ayer su intención de recurrir a la vía judicial si no se retiraba el texto que les hizo llegar la Dirección General de la Guardia Civil.
Los colectivos profesionales de guardias habían abierto la posibilidad de recurrir a la vía judicial para frenar el borrador de texto normativo en el que, entre otras medidas, se prohibía la exhibición de tatuajes o se impedía fumar a los agentes durante «la práctica totalidad del servicio».
«UN MODELO DE PEINADO» // La interpretación de los agentes es que la nueva norma que se pretendía aprobar por parte del Ministerio de Interior implicaba, además, «un único modelo de peinado tanto para hombres como mujeres» y no permitía «llevar más de un anillo o una pulsera».
