La niña rusa de tres años que ingirió por accidente una pastilla de éxtasis en un parque infantil de Ibiza evoluciona favorablemente en el Hospital Son Espases de Palma de Mallorca. La pequeña ingresó el pasado jueves en el centro en estado crítico, pero fuentes sanitarias informaron ayer de que el estado actual de la menor ha pasado a grave.

Según la Guardia Civil, que ya ha tomado declaración a los padres y a testigos, la niña estaba jugando en el parque cuando, según relató la madre, cogió un objeto pequeño de color naranja que se llevó a la boca y que, cuando la progenitora se dio cuenta, la niña ya se lo había tragado.