Una menor de 15 años ha denunciado haber sido violada en el barrio de la Milagrosa de Pamplona el último día de Sanfermines. El Ayuntamiento de Pamplona confirmó la agresión sexual, aunque no ha facilitado más datos al respecto para no interferir con la investigación policial y para garantizar la protección de la privacidad de la víctima.

En el balance de las fiestas que acabaron el viernes, el alcalde Joseba Asiron y el concejal encargado de Seguridad, Aritz Romeo, afirmaron que este año se han presentado dos denuncias por agresión sexual frente a las cinco del anterior y 12 por abuso sexual, una menos que en 2016. Ese era precisamente uno de los objetivos, que ningún ataque sexista quedara sin respuesta.

11 DETENIDOS // Por estos hechos, 11 personas han sido detenidas, un dato que el alcalde quiso destacar, porque supone que «en el 79% de los casos se ha localizado al responsable». Además, varios de los ellos han pasado cuentas ante la justicia, por la fórmula de juicios rápidos. Un joven que había realizado tocamientos ha sido condenado a ocho meses de prisión y 750 euros de indemnización a la víctima; y otro, por idéntico motivo, a 2.880 euros de multa y 500 de compensación.

Con estos datos, y pese a la presunta violación, los responsables municipales consideran que se ha demostrado que los Sanfermines son «una de las fiestas más seguras de todo el Estado».

La edición de los festejos que acaba de terminar pretendía suponer un punto de inflexión en cuanto a las ataques contra la libertad sexual que, lamentablemente, venían incrementándose año tras año, hasta consolidar una peligrosísima imagen de ciudad sin ley. Sin duda, la violación múltiple registrada en el 2016 disparó todas las alertas, aunque la sensación de impunidad con la que se sucedían las agresiones sexuales, junto a otros tipos de delitos, eran ya motivo de preocupación desde hace años.

El alcalde consideró «muy positivo» el avance logrado hacia la «consolidación de Pamplona como ciudad referente en la lucha en contra de las agresiones sexistas». En todo caso, como afirmó el alcalde, «aún queda mucho trabajo por hacer». Han vuelto a repetirse las imágenes de mujeres subidas a hombros contra su voluntad, mientras eran manoseadas por desconocidos. Pero la sociedad ha tomado un papel activo y se han manifestado contra las agresiones sexuales en estas celebraciones navarras.