Hasta el año 2004, nadie pensaba que en la atmósfera de Marte pudiera haber gas metano, un hidrocarburo (CH4) cuya presencia en la Tierra solo tiene dos orígenes: o bien procede de la actividad bacteriana en ambientes sin oxígeno -como en el tracto intestinal de los rumiantes o en los pantanos donde se descompone la materia orgánica- o bien, mucho más raramente, es resultado delvulcanismo, como se observa por ejemplo en las fuentes sulfurosas terrestres. Y, claro, en Marte actualmente ni hay vida ni volcanes activos. O eso parecía.

Sin embargo, aquel año 2004 la sonda europea 'Mars Express'informó de la detección de trazas de metano en la baja atmósfera. Con posterioridad, la nave 'MGS' y el robot 'Curiosity', ambos de la NASA, han detectado indicios similares. A partir de diciembre, cuando concluya su inserción en órbita y se pongan en marcha sus instrumentos científicos, el orbitador TGO, de la misión ruso-europea ExoMars, intentará descifrar ese misterio que estimula la imaginación y no deja de intrigar a los científicos.

El principal instrumento dedicado a estos menesteres se llamaNomad y ha sido diseñado y fabricado por el Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), centro del CSIC en Granada. "Vamos a multiplicar por 100 la precisión de los datos tomados por 'Mars Express'", comenta a este diario el investigadorJosé Juan López Moreno. "Nomad no solo generará el primer mapa global y preciso de metano en la atmósfera de Marte, sino que también lo rastreará para hallar la fuente de producción o desaparición del gas", añade. Nomad será capaz de distinguir también la composición isotópica del metano para comprobar si tiene unorigen geológico o biológico.

Nomad, prosigue López Moreno, es un espectrógrafo de alta resolución que empleará la técnica de la ocultación solar:observando cómo el Sol se oculta tras el limbo del planeta (es decir,"observando continuamente puestas de Sol y amaneceres desde su órbita"), podrá deducir los componentes que forman la atmósfera.

LAS MOLÉCULAS NO SOBREVIVEN

Como las moléculas de metano se degradan con relativa facilidad con la radiación solar -sobreviven a lo sumo un siglo-, la única opción es que haya una fuente que las produzca. Y lo curioso del caso, como detectó un análisis realizado con los supertelescopios Keck desde Hawái, es que su presencia fluctúa: en verano hay 10 veces mas que en otros momentos del año. Además, parece haber ciertas zonas donde los niveles se disparan. No hay mucho metano en Marte, apenas 0,7 partes por millón, 4.000 veces menos que en la Tierra, pero "tienen que venir de algún lado", reitera López Moreno.

Sin embargo, hay una explicación alternativa. Es posible que en tiempos remotos hubiera habidograndes cantidades de metano, de origen volcánico u orgánico,pero por algún proceso desconocido quedaron atrapadas bajo la superficie, fundamentalmente en los polos. Ahora, aprovechando las temperaturas más suaves del verano, estarían emergiendo a partir de pequeñas chimeneas en las regiones ecuatoriales.

López Moreno y el IAA, que coordinan un instrumento esencial en ExoMars, lamentan el "maltrato económico" que han sufrido por parte del ministerio y los planes estatales de I+D. "Hemos tenido que mendigar y, por suerte, nuestros socios belgas se han hecho cargo de diversos gastos, incluyendo los transportes y nuestra asistencia a las reuniones comunes. Nos han pagado el 95%", explica el investigador. "España ha puesto 90 millones de euros para pagar a las industrias implicadas en la misión, pero la financiación de la instrumentación científica ha sido una absoluta vergüenza -concluye-, solo se ha solventado gracias al esfuerzo personal".