Los trabajos para el rescate de Julen afrontan otra jornada clave cuando se cumplen 13 días desde que el niño de 2 años cayó en el pozo de Totalán (Málaga). La Guardia Civil destaca el optimismo generalizado en el equipo de rescate y pide cautela con los plazos marcados. Las dificultades del terreno, de hecho, están marchando sobremanera este rescate y cualquier previsión temporal es aventurarse.

La galería que excavan los mineros servirá para acceder al punto donde se cree que se encuentra atrapado el pequeño: debajo del tapón de tierra hallado a 71 metros de profundidad. Hace días ya advirtieron que las labores podrían prolongarse hasta 24 horas, y las previsiones parece que se están cumpliendo.

La dureza extrema de algunos tramos de pieza que han encontrado obligó finalmente a recurrir a pequeños explosivos para ayudarles a romper la roca. Por las dimensiones del espacio en el que están confinados y la delicadeza de estas tareas, que puede afectar al pozo donde se encuentra el niño de dos años, solo pueden emplear martillos neumáticos, palas y hachas, a mano.

De momento han llegado a 1,5 metros de los 4 que les separan de Julen, en unas tareas que ven lentas por esa dureza del terreno.

Los mineros están trabajando en las peores condiciones posibles. En turnos de dos personas, que se cambian cada 30 o 40 minutos en función de las condiciones de los trabajos, y cargados con un pesado equipo de respiración que regenera el aire que consumen, tienen que ir excavando una galería de poco más de un metro de diámetro y cuatro de longitud. Se trata de un rescate sin precedentes. Desde el pasado día 13 son más las personas implicadas en el operativo.

En las microvoladuras se requiere la intervención de la Guardia Civil. De hecho, efectivos de dicho cuerpo también forman parte del equipo de rescate, junto a los mineros y miembros del Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga.

Los mineros que deben rescatar a Julen llevan toda la noche trabajando. Según el último balance han excavado un metro y medio de los cuatro que tienen que cavar para llegar al niño. En las últimas horas, los técnicos han tenido que realizar dos microvoladuras en la galería dada la dureza del terreno.

Recordamos que este operativo de rescate está formado por 26 efectivos, en concreto de ocho efectivos de la Brigada de Salvamento Minero, diez guardias civiles --ocho especialistas de Montaña y dos de Actividades Subacuáticas-- y ocho bomberos del Consorcio Provincial de Málaga.

De ellos, son los mineros de Asturias los encargados de bajar de dos en dos en la cápsula diseñada por el director técnico del Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga, Julián Moreno; y fabricada por dos herreros malagueños. Los mineros llevan ya 14 horas excavando el túnel horizontal con el que llegarán hasta donde se presume que está Julen.