Más de la mitad de los españoles (un 56%) asegura haber reducido el consumo de refrescos azucarados en los dos últimos años, mientras que un 47 por ciento ha bajado el ritmo con la bollería y un 38% con el alcohol. Estos son algunos de los datos de una encuesta realizada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) a 1.284 ciudadanos de entre 18 y 74 años, que refleja que a más de la mitad les preocupa llevar una dieta sana.

El estudio demuestra que la mayoría de las personas ha cambiado algún hábito de su dieta para llevar una alimentación más saludable, señala la OCU en un comunicado.

Así, además de reducir el consumo de refrescos, bollería y alcohol, un 30% asegura que come más fruta que hace dos años y un 31% ha aumentado también la ingesta de verduras y hortalizas.

No obstante, según el patrón de referencia elaborado por la OCU para la realización del estudio (perfil nutricional definido por expertos en base a hábitos alimentarios y ejercicio físico), únicamente el 32% tiene una alimentación razonablemente sana, mientras que un 19% no tienen una nutrición saludable. Aun así, el 43 % cree que tiene buenos hábitos nutricionales.

La encuesta revela también que el 6% está consumiendo más dulces y bebidas que hace dos años, un 7% come menos fruta y un 5% ingiere menos verdura. El motivo, según OCU, se debe, al menos en parte, a una cuestión económica, ya que el pescado, la fruta y la verdura son los alimentos que más se reducen cuando hay que hacer recortes en la lista de la compra.

El estudio también revela que en España se sigue consumiendo bastante pescado, tanto azul como blanco, así como carne: casi una cuarta parte de los encuestados la come lmás de tres veces por semana.

Y pese a que los nutricionistas aconsejan no hacerlo, el 72% come mientras ve la tele y el 9% lo hace con el móvil o la tableta en la mesa.