La capital rusa amaneció este sábado con casi 30 grados bajo cero (29,8), las temperaturas más bajas en un día de Navidad en lo que va de siglo, según informaron los servicios meteorológicos.

Por este motivo, el ayuntamiento se ha dirigido a los moscovitas, especialmente a los más ancianos, para que se abstengan de salir a la calle o si lo hacen se vistan adecuadamente.

También ha pedido a los conductores que no cojan el coche y opten por el transporte público, ya que debido a las bajas temperaturas y al mal estado de las carreteras aumenta notablemente la siniestralidad.

La bajada de las temperaturas coincidió anoche con la misa del Gallo y este sábado con la Navidad ortodoxa, por lo que las autoridades locales han decidido instalar 130 autobuses para que los fieles se resguarden del frío frente a los principales templos de la ciudad.

TÉ Y COMIDA GRATIS PARA LOS TRANSEÚNTES

El Ministerio de Situaciones de Emergencia también ha decidido instalar cocinas de campaña en los principales lugares de asueto, desde parques a centros recreativos, para ofrecer gratuitamente te y comida a los transeúntes.

Según los servicios meteorológicos, el día de Navidad más frío que se recuerda en Moscú tuvo lugar en 1891, cuando los termómetros marcaron 34,8 grados bajo cero.

Las temperaturas en la capital comenzaron a bajar repentinamente a mediados de la semana y lo seguirán haciendo hasta principios de la próxima semana, cuando se espera que los termómetros marquen hasta 35 bajo cero.