La pandemia de coronavirus está causando estragos en los geriátricos. Solo ayer se conoció la muerte de 33 personas ingresadas en cinco residencias de Barcelona, Vitoria, Ciudad Real y Madrid, que se suman a las 17 denunciadas el martes por familiares de otro establecimiento de la capital de España. Y podrían ser bastantes más, porque a un buen número de fallecidos no se les está haciendo la prueba pese a presentar síntomas. La situación de emergencia ha llevado a varios de los responsables de los centros a pedir «auxilio» a las administraciones.

Quizás el principal problema al que se enfrentan las residencias es que no tienen ni personal ni material suficiente para hacerse cargo de los contagiados leves que se detectan y evitar que contagien. Para descargar a los hospitales, especialmente en Madrid, los protocolos dictan que los afectados leves se queden aislados en los propios geriátricos, pero no les proporcionan las herramientas para llevarlo a cabo. El resultado está a la vista.

Uno de los primeros directivos en quejarse fue el padre Ángel. «Pido ayuda urgente a la Comunidad de Madrid y al Gobierno de España», reclamó tras la muerte de seis ancianos, dos de ellos por casos confirmados de coronavirus, en la residencia Montserrat Caballé, ubicada en el distrito de Barajas y regentada por Mensajeros de la Paz. También lo hizo el director de la residencia de mayores Elder de Tomelloso (Ciudad Real), donde han fallecido 16 ancianos, 12 de ellos casos confirmados por coronavirus. José Manuel San Pedro, que también ha dado positivo y tiene fiebre, reclamó atención urgente de las autoridades , ya que se «sienten desbordados y abandonados» por la situación y carecen de medios humanos y materiales.

Al negro balance del día hay que sumar a seis ancianos de la residencia de Capellades, en la comarca del Anoia. También hay que añadir los cinco fallecidos en la residencia Nuestra Señora de la Antigua de Morata de Tajuña (Madrid). Y finalmente, las ocho muertes en una de Vitoria.

En la Comunitat Valenciana, las residencias de ancianos en las que se produzcan brotes de coronavirus pasan al control y protección de la Conselleria. En la residencia de Alcoi hay 134 residentes, 58 permanecen aislados con síntomas y 8 de ellos controlados con una unidad hospitalaria domiciliar. En la de Elche hay 116 ancianos con síntomas, tres están aislados en el centro, cinco ingresados, 3 en planta y dos en la UCI. En la de Torrent hay 77 residentes, 51 están aislados con síntomas y 38 hospitalizados, 32 de ellos en planta y 6 en la UCI.