Los nuevos controles de pasaportes que han entrado en vigor este mes de abril, y que comportan que los pasajeros tengan que mostrar sus documentos identificativos al entrar y salir del espacio Schengen (UE), provocó a lo largo del día de ayer largas colas en el aeropuerto de Barcelona.

Este incremento de los controles de entrada y salida en los aeropuertos forma parte de las medidas antiterroristas puestas en marcha en los distintos países europeos, y en el aeropuerto de El Prat muchos tuvieron que esperar más tiempo de lo habitual --en casos puntuales hasta tres horas-- debido a la gran afluencia por el puente del 1 de mayo.

Esta situación incluso causó retrasos en algunos vuelos y, según indicaron numerosos pasajeros a través de las redes sociales, algunos fueron cancelados.

Fuentes policiales achacaron a una «concatenación de factores» el colapso temporal del control de pasaportes debido a las nuevas medidas adoptadas desde el 7 de abril en este servicio, al «alud» de vuelos y pasajeros del sábado por la noche y de ayer, la falta de información al respecto por parte del personal del aeropuerto y diversos incidentes (detenciones, pasaportes falsos, menores mal acreditados) que obligaron a la policía a redoblar su trabajo. Los agentes temen que los retrasos se repitan hoy si no hay más coordinación, lo que podría afectar a muchos castellonenses que vuelan desde Barcelona.