En España hay en la actualidad tres millones de personas con asma, aproximadamente, y en el mundo más de 150 millones de afectados; estamos ante una enfermedad respiratoria crónica que se produce cuando la exposición a ciertas sustancias o determinadas circunstancias inflaman los bronquios, que se estrechan y pueden llegar a obstruirse. La Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) celebró ayer el Día Mundial del Asma con el el lema STOP al asma.

El asma puede provocar problemas para respirar que, en ocasiones, suponen riesgo vital para el afectado, señala la doctora Alicia López de Ocañiz, experta médica de Cinfa, laboratorio farmacéutico que ha difundido 10 consejos para controlar esta patología.

Otros síntomas del asma son la tos, los pitidos o silbidos en el pecho al respirar --sibilancias-- y la secreción de un moco viscoso y espeso, difícil de expulsar; de igual modo, puede asociarse a rinitis y sensación de dolor u opresión en el pecho, explica.

La intensidad de los síntomas, es variable y puede cambiar incluso a lo largo del día, y a lo largo de días y meses; con frecuencia, los síntomas son mayores durante la noche o al inicio de la mañana después de despertar.

CONTROL AMBIENTAL // «El asma no se cura, por lo que el control ambiental es fundamental para mantener la enfermedad a raya y poder llevar un día a día lo más normal posible: los asmáticos han de identificar qué sustancias o alergenos empeoran su asma y tratar de evitarlos. También es muy importante usar correctamente el inhalador y, con la ayuda del médico, aprender a reaccionar frente a una crisis», acentúa la doctora López de Ocáriz.

Existe un consenso dentro de la comunidad científica sobre la influencia de la contaminación ambiental en esta enfermedad. Según SEPAR, la contaminación atmosférica, puede tanto agravar el asma, como causarla.

Un estudio epidemiológico y molecular, liderado por el grupo de investigación en Neumología del Vall d’Hebron Instituto de Investigación de Barcelona, publicado a finales del pasado abril en la revista Science of the Total Environment, constata por vez primera que la contaminación por partículas diésel puede causar asma en personas sanas. Otros desencadenantes son el tabaco, los alérgenos --polen, ácaros, algunos mohos, el pelo o la caspa de los animales…--, las infecciones respiratorias como el resfriado o la gripe, y el reflujo gastroesofágico.

El Día Mundial del Asma está auspiciado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Global Initiative for Asthma.

Para el doctor José María Echave-Susaeta, jefe de servicio de Neumología del hospital La Luz (Grupo Quirónsalud), uno de los factores de riesgo más importantes que incrementan las probabilidades de desarrollar un asma es el hereditario. Este especialista menciona otros factores de riesgo como la obesidad, la rinitis crónica, el tabaquismo activo o pasivo, o incluso factores emocionales como el estrés laboral.

En España tiene asma un 5% de los adultos, y un 10% de los niños. Se suele iniciar antes de los 10 años y es menos frecuente su inicio después de los 40 años.

El asma es el segundo motivo de consulta al alergólogo en España, y hasta 8 de cada 10 casos de esta patología son de origen alérgico. Por delante solo se encuentra la rinitis alérgica.