Naciones Unidas ha informado que está estudiando la posibilidad de plantar bosques urbanos en África y Asia, cuatro veces el tamaño de Hong Kong para hacer frente al cambio climático.

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha indicado que los procesos de urbanización en África y Asia están contribuyendo al aumento del calentamiento global, por lo que la plantación de árboles podría favorecer una mejora de la calidad del aire y permitiría acabar con el riesgo a sufrir inundaciones y degradaciones en los terrenos.

Crecen las áreas urbanas

En este sentido, la organización está considerando crear medio millón de hectáreas de bosques urbanos de cara a 2030, una cuestión que será abordada durante la Asamblea General de la ONU esta semana. "Si miras los datos de urbanización, especialmente en algunas partes de Asia y África, ves que está sucediendo", ha manifestado Simone Borelli, experto de la FAO en temas de bosques urbanos.

"Por ejemplo, las ciudades chinas están creciendo muy rápido y en 20 años podría haber un incremento del 20 o 30 por ciento en la demografía", ha aseverado Borelli antes de sostener que "a menos que empecemos a plantar ahora se hará demasiado tarde".

De llevarse a cabo, los bosques urbanos podrían reducir la temperatura hasta 8C y bajar el coste del aire acondicionado hasta un 40 por ciento, según datos de la FAO. Con el 70 por ciento de la población mundial viviendo en ciudades de cara a 2050, la mayoría en África y Asia, el impacto medioambiental de las urbanizaciones podría empeorar la solución sin que haya posibilidad de buscar una solución.