El conflicto judicial de Juana Rivas y el padre de sus hijos, Francesco Arcuri, está lejos de suavizarse. Arcuri, condenado por maltrato en el 2009 y de quien la mujer huyó este verano con los niños para no tener que devolvérselos, no entregó ayer a los menores a su madre para pasar unos días aprovechando la estancia de Rivas en Italia con motivo de la vista por la guardia y custodia de los menores, como fijó un juez italiano. Ambos progenitores declararán hoy en el juzgado. J.C.