"Mi corazón nunca sospechó que mi hijo le haría esto a mi hija". En su primera aparición en los medios, Anwar Azeem, la madre de la modelo y activista Qandeel Baloch, ha dicho que ella y su marido también fueron drogados la noche en que su hijo mató, "sin remordimientos", a la conocida como "Kim Kardashian paquistaní". "Mi marido y yo quedamos profundamente dormidos. Bebimos leche que habían mezclado con sedantes", ha explicado en una entrevista con la BBC.

Baloch murió el 16 de julio estrangulada por su hermano. En una rueda de prensa tras ser detenido, dijo que lo había hecho "por honor", porque la actitud de su hermana se había convertido "en algo que no podía soportar". Con esto se refería a la creciente actividad de Baloch en las redes sociales, donde colgaba fotografías personales de contenido erótico, prohibidas por las facciones más conservadoras del país.

Según la señora Azeem, los hermanos de Baloch "siempre tuvieron odio en sus corazones". "Antes no les importaba demasiado", dice, "pero recientemente todo empeoró". La gente, cuenta, "envenenó"sus mentes. Muhammad Azeem, el padre de la chica, ha sido aún más duro con su hijo, ha declarado que deberían "dispararlo en el acto". "Era mi hija y mi mejor amiga", ha dicho de la chica, a quien encontraron con la cara llena de moratones y la lengua negra.

LEY CONTRA LOS CRÍMENES DE HONOR

Tras el terrible suceso, que se ha hecho viral a través de las redes sociales, el Gobierno paquistaní ha anunciado que aprobará una ley contra los llamados "crímenes de honor". 500 personas, la mayoría de ellas mujeres, mueren cada año en Pakistán por crímenes de este tipo. Son asesinatos cometidos por familiares por lo que consideran una "afrenta moral" contra los valores conservadores tradicionalistas. Son muy habituales en el sur de Asia.

"Hemos alcanzado un consenso en el comité conjunto del Parlamento en relación a las leyes contra la violación y los asesinatos por honor", ha publicado en su cuenta de Twitter Maryam Sharif, hija del primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif. La ley, ha dicho, se presentará ante la cambra legislativa en dos semanas. En 2014, el Senado ya había aprobado una ley contra estos crímenes, pero no llegó al Parlamento para su votación.