El operativo de búsqueda del pequeño Gabriel Cruz Ramírez, desaparecido el martes en la barriada de Hortichuelas Bajas, en Nïjar (Almería), prosiguió ayer aunque las esperanzas de hallarlo en las proximidades cada vez son más reducidas y cobra cuerpo la hipótesis del secuestro. La falta de pistas estimula la proliferación de bulos en internet y la aparición de aprovechados. Los padres confían plenamente en la investigación que está llevando la Guardia Civil y han pedido que cese la difusión de rumores y las llamadas que reciben de videntes que supuestamente saben donde se encuentra su hijo.

Tanto Ángel como Patricia, los padres, se encuentran en estado de shock. Tratados desde el primer momento por psicólogos de emergencia, ambos atienden como pueden a las entrevistas de los programas de televisión que se han instalado en la zona cero. Llevan separados desde hace mucho pero su relación es buena, según confirman los vecinos. La custodia la tiene la madre que vive con el niño en la ciudad de Almería. Con el padre, que vive en Vícar (Almería), pasa un fin de semana de cada dos y suele hacerlo en la casa de su abuela, el último lugar donde fue visto el martes.

«Han llegado a decir que nuestra relación es mala, cuando es maravillosa. También que si ha pasado una furgoneta blanca. Nos llaman los videntes ofreciéndonos decir donde esta el niño. Ruego que nadie diga nada que no sea verdad. No hay que hacer caso a los bulos. No hay furgonetas ni nada. Pedimos que si alguien sabe algo llame a la Guardia Civil y a nosotros nos dejen libre el teléfono», pidió ayer jueves Patricia en declaraciones a distintas cadenas de televisión.

Los padres insistieron también en que el niño no se pudo perder, que el camino que cogió para ir a jugar a casa de unos amiguitos, lo hacía prácticamente «desde que nació». Son apenas cien metros por un amplio camino de tierra la distancia que tenía que recorrer. El niño es «autónomo, muy responsable y obediente», «no es de escaparse ni de hacer trastadas», ha añadido la madre.

Consuelo, la vecina que vive más cerca del camino donde se produjo la desaparición, explicó a los investigadores que a esa hora oyó «un golpe muy fuerte como el de un portazo del coche» al que no le dio importancia, pero luego ha pensado que podría estar relacionado con el suceso.

El juez de Níjar que lleva el caso ha decretado el secreto de las investigaciones. Efectivos de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil se desplazaron ayer a la zona desde Madrid.

RAJOY PIDE CONFIANZA // El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, pidió a los padres del niño que «confíen» en el trabajo de la Guardia Civil para encontrar al menor. «Como todo el mundo sabe, lo más importante que tiene una madre o un padre son sus hijos y a partir de ahí está todo lo demás», argumentó Rajoy en el programa de Ana Rosa de Tele 5.

Alrededor de 150 personas colaboran en las labores de búsqueda, entre efectivos policiales, de Protección Civil y voluntarios que rastrean la zona.