El papa Francisco ha publicado este viernes en Twitter la imagen de un crucifijo con un chaleco salvavidas como el que usan los inmigrantes que se lanzan en pateras a intentar cruzar el Mediterráneo para pedir "el compromiso inderogable de salvar todas las vidas humanas".

Francisco ya avisó de que el problema de la inmigración no se resuelve bloqueando barcos y ha incidido en que es "la injusticia" la que los condena a morir ahogados. Así lo puso de manifiesto en su reunión con 33 refugiados que llegaron el pasado 2 de diciembre a Roma desde la isla de Lesbos (Grecia), cuya acogida corre a cargo de la Santa Sede, a través de la Limosnería Apostólica y de la Comunidad de San Egidio.

"Nos enfrentamos a otra muerte causada por la injusticia. Sí, porque es la injusticia lo que obliga a muchos migrantes a abandonar sus tierras. Es la injusticia la que los obliga a cruzar los desiertos y sufrir abusos y torturas en los campos de detención. Es la injusticia que los rechaza y los hace morir en el mar", ha afirmado el Papa.

CHALECO DE ONG 'OPEN ARMS'

En el curso de la reunión, Francisco les ha mostrado un chaleco salvavidas como el que le regaló, Oscar Camps, director de la ONG 'Open Arms, y que posteriormente donó a la Sección de Migrantes y Refugiados, del Departamento del Servicio Integral de Desarrollo Humano, como gesto de "compromiso ineludible de la Iglesia de salvar las vidas de los migrantes, para luego poder acogerlos, protegerlos, promoverlos e integrarlos", según dijo entonces.

El Papa ha invitado a escuchar "el grito desesperado de tantos hermanos y hermanas que prefieren enfrentarse a un mar tormentoso en lugar de morir lentamente en los campos de detención libios, lugares de tortura y esclavitud despreciable". Y se ha preguntado: "¿Cómo podemos permanecer indiferentes ante los abusos y la violencia de los que son víctimas inocentes, dejándolos a merced de traficantes sin escrúpulos?".

VACIAR CAMPOS DE LIBIA

En este sentido, ha agradecido la labor de todos los que "han decidido no permanecer indiferentes y hacer todo lo posible para ayudar a las víctimas" y ha asegurado que el problema no se resuelve "bloqueando sus barcos" sino "vaciando los campos de detención en Libia". "Es necesario denunciar y enjuiciar a los traficantes que explotan y maltratan a los migrantes, sin temor a revelar connivencia y complicidad con las instituciones", ha dicho.

Así, ha instado a dejar de lado "los intereses económicos" y enfocarse en la persona. Por ello ha sentenciado: "Debemos ayudar y salvar, porque todos somos responsables de la vida de nuestro prójimo, y el Señor nos pedirá cuentas en el momento del juicio". Para el Papa "el compromiso" de todos" es "indispensable de salvar cada vida humana". "Es un deber moral --ha puntualizado-- que une a los creyentes y no creyentes".