Agentes de los Mossos detuvieron el 30 de octubre en Vilafranca del Penedès (Barcelona) a un hombre de 43 años, serbio, por transportar droga. La policía supo que un camión congelador circulaba por la AP-7 a su paso por Sant Sadurní d'Anoia con una cantidad indeterminada de marihuana entre su mercancía. Además, las informaciones apuntaban a que la intención del detenido era cruzar la frontera y dirigirse con la droga a algún país europeo.

De ahí que los Mossos montaron un operativo de vigilancia que permitió detener el camión en un área de descanso de la AP-7, a la altura del punto kilométrico 181, en Sant Sadurní d'Anoia.

Durante el registro del camión los investigadores localizaron tres palets de productos congelados y gran cantidad de marihuana envasada en bolsas con un peso de 82,8 kilos que tendría un precio en el mercado ilegal de más de 400.000 euros.

EL TACÓGRAFO, MANIPULADO

Por otra parte, agentes de Tráfico comprobaron que se había manipulado el software del tacógrafo para alterar los kilómetros realizados con el objetivo de evitar paradas y así agilizar el transporte de la droga. El detenido también fue denunciado administrativamente con una sanción de 4.000 euros.

El detenido pasó a disposición judicial el 2 de noviembre ante el juzgado de instrucción en funciones de guardia de Vilafranca del Penedès, que ordenó el ingreso en prisión.

Las gestiones que ha llevado a cabo la Policía Local con posterioridad, previa autorización judicial, han permitido que se entregaran las 10 toneladas de producto congelado a una entidad benéfica sin ánimo de lucro.