La juez del Juzgado 2 de Alcañiz (Teruel) dictó ayer auto de prisión provisional comunicada y sin fianza para el serbio Norbert Feher, alias Igor el Ruso, acusado del asesinato de dos guardias civiles y un ganadero vecino de Andorra el pasado jueves en Albalate del Arzobispo, una vez finalizada su declaración por la mañana. Poco antes de las seis de la tarde, el detenido abandonó custodiado los juzgados del municipio e ingresó en la cárcel de Teruel.

El presunto homicida compareció ayer por la tarde ante la magistrada de Alcañiz después de prestar declaración por videoconferencia ante la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela, quien tomó declaración a Feher por los delitos de robo y asesinato cometidos en Italia y cuyas autoridades solicitaron la entrega del detenido.

El serbio, buscado por la Interpol, aceptó ser entregado al país transalpino, aunque su extradición no se ejecutará hasta que cumpla con las responsabilidades penales que tiene en España.

En cualquier caso, Italia podría solicitar una entrega temporal para ser juzgado allí por los hechos por los que se le reclama.

SIN EMPLEO // Norbert Feher, conocido también como Igor Vaclavic, manifestó ante la juez Lamela que se encontraba en España desde septiembre y que no tenía ningún trabajo. Su declaración fue el último episodio de este serial policíaco, después de que fuera detenido en la madrugada del viernes por la Guardia Civil de Castellón sin oponer resistencia. Los motivos por los que se accidentó con el coche previamente robado tras emprender huida de ocho horas aún siguen siendo un misterio en la investigación.

Feher es, además, el presunto autor de los disparos que hirieron el pasado 5 de diciembre a dos vecinos de Albalate del Arzobispo, un suceso que trataban de investigar los dos guardias civiles asesinados cuando fueron sorprendidos por el exmilitar serbio, que después se dio a la fuga.

El enorme revuelo mediático que ha suscitado el caso provocó que decenas de periodistas se congregaran a las puertas del juzgado de Alcañiz, horas de antes de que Igor el Ruso conociera el auto de la magistrada y entrara acto seguido en la cárcel de Teruel.