El padre del bebé de Pineda, muerto el pasado lunes en el Hospital Vall d'Hebrón con graves lesiones cerebrales, ingresa a prisión sin fianza. Lo ha ordenado hoy el juzgado número 3 de Arenys de Mar, que investiga el caso. El hombre se enfrenta a un delito de homicidio, aunque el juez no descarta acusarle de asesinato a traición mientras que avance la investigación.

El menor ingresó el 4 de enero en el hospital con un pronóstico muy grave, y finalmente acabó muriendo 17 días después. El hospital activó el protocolo del maltrato infantil y, tras la investigación de la Generalitat, se retiró la custodia de los progenitores y los mossos detuvieron al padre, que quedó en libertad con cargos. Según el relato de la madre, el hombre confesó haber maltratado el menor poco antes de que empezara a convulsionar.

Durante sus pocos meses de vida, el bebé fue atendido en más de tres hospitales. La 'consellería' de Salut constató que en algunos casos los facultativos que lo atendieron no tuvieron acceso a sus antecedentes clínicos, aunque niega ningún error clínico. Antes de la alerta del Vall d'Hebrón, una enfermera activó los servicios sociales municipales por "falta de educación sanitaria" de los progenitores.