El debate sobre la homosexualidad en 'Frozen' no es nuevo. Desde que se estrenó en noviembre del 2013 el mayor éxito de Disney en los últimos años ha cosechado críticas y loanzas, según los sectores, sobre las tendencias sexuales que se intuían en algunos de sus personajes. En el filme de presentación de las hermanas Elsa y Anna aparecía un personaje gordito y bonachón, el comerciante Oaken, dueño de una tienda con sauna que algunos interpretaron era la representación de un gay padre de familia.

Preguntada por la cuestión, la guionista y codirectora del filme, Jennifer Lee, nunca quiso pronunciarse ni a favor ni en contra. "Siento que la película pertenece al mundo. No me gusta decir nada, simplemente que los espectadores interpreten lo que quieran, depende de ello".

Las palabras de Lee apaciguaron por un tiempo a los reacios a que Disney incluyera personajes homosexuales en sus películas en favor del clásico chico-encuentra-chica-se-casan-y-fueron-felices-y-comieron-perdices.

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Sin embargo, de nuevo ha vuelto la pugna y los defensores de que la factoría del ratón Mickey denuncian que "se intenta adoctrinar a los niños utilizando las películas infantiles" que atribuyen "a las presiones de los grupos LGTB" y los "'lobbies' de la ideología de género". Y en la red se ha iniciado un pulso entre los que están a favor (#GiveElsaAGirlFriend) y en contra (#CharmingPrinceForElsa) de que la reina de hielo tenga novia en la secuela del filme, previsto para el 2018.

Las palabras del pastor Kevin Swanson, de la Iglesia de la Reforma, denunciando en su programa de radio de Colorado que 'Frozen' es "maléfico" y que Disney "es una de la organizaciones más progay del país" calaron hondo entre algunos sectores, de la misma manera que en los últimos meses, poderosos grupos estadounidenses como la Alianza de Gays y Lesbianas contra la Difamación (GLAAD) han cargado contra Disney por no incluir homosexuales en sus películas.

Además, a la polémica echan más fuego dos campañas de recogidas de firmas que piden a Disney que no haga de Elsa la primera princesa lesbiana de su historia. CitizenGo, a nivel mundial (211.463) y Hazte Oír, en España (más de 28.441), piden al presidente de Disney, Simón Amselem, piden un príncipe para Elsa.

"Estos grupos pretenden imponer un modelo social y cultural en el que cada uno elija su género. Esta estrategia necesita lanzar sus mensajes a los niños para que asuman 'nuevos modelos' de familia y se sometan a la nueva ideología totalitaria de género. Estamos ante una ofensiva global contra la familia", ha denunciado el presidente de Hazte Oír, Ignacio Arsuaga.

ENCRUCIJADA PARA DISNEY

En opinión del presidente de Hazte Oír, "Disney se encuentra ante una coyuntura histórica: seguir transmitiendo valores universales con los que se han educado generaciones o convertirse en una herramienta ideológica al servicio de una minoría".

En el lado opuesto, Idina Menzel, voz del personaje en inglés, ya se ha pronunciado al respecto: "Creo que es genial [que Elsa tenga novia]". A su juicio, la pelota está en el tejado del gigante del entrenimiento. "Disney tiene que lidiar con eso", ha declarado. "Pase lo que pase, el personaje ha cambiado mi vida", asegura.

"Las historia es genial y de gran calidad", es lo poco que ha adelantado Kristen Bell (la voz de Anna en inglés), sobre la nueva película de animación del estudio, cuya producción comenzará en breve.

Aún quedan meses para la polémica y el debate.