Los aventureros que desafían la gélida bahía de San Francisco ahora tienen una razón más para temblar, más allá del impacto térmico: los ataques de leones marinos. Una insólita amenaza por la que un bañista ha estado a punto de perder sus genitales.

El Servicio de Parques Nacionales ha prohibido nadar durante unos días en la bahía a causa de tres ataques de leones marinos en apenas una semana. Rick Mulvihill fue gravemente mordido el viernes por la mañana y hospitalizado a causa de ellos, según informaba el periódico local San Francisco Chronicle, citando al departamento de bomberos.

La víctima forma parte del South End Rowing Club, cuyos miembros se bañan a primera hora de la mañana en aguas cuya temperatura media en diciembre es de unos 12 grados.

El mamífero marino "lo atrapó aquí, junto a las joyas de la familia", declaró al respecto Bob Roper, otro miembro del club, mientras señalaba su entrepierna. "Llevo aquí 50 años y nunca había escuchado nada de esto. Muchos nadadores están muy, muy nerviosos ahora y los entiendo", subrayó Roper. Todos los ataques podrían ser responsabilidad del mismo animal, aventuraba la veterinaria Claire Simeone.