El agente de Policía Nacional que fue ingresado en el Hospital 12 de Octubre tras ser atacado por el hombre abatido en Villa de Vallecas ya ha recibido el alta, según ha informado a Europa Press un portavoz de la Jefatura Superior de Policía.
Se trata del policía que recibió un corte profundo en el rostro cuando el fallecido, que contaba con múltiples antecedentes por violencia de género, se abalanzó contra él cuando accedió con su compañero a la vivienda de su novia, a la que amenazaba con quemarla.
El hombre, de unos 50 años, murió tras ser abatido por disparos de la Policía después de apuñalar a dos agentes en la calle Caranavajos número 12, en el distrito madrileño de Villa de Vallecas.
El 091 recibió una llamada a las 02.25 horas de una mujer alertando de que el novio de su hija estaba amenazándola con quemarla viva en su domicilio, portando un cuchillo. Al lugar se personó un indicativo de la Policía Nacional que acompañó a la madre a la vivienda.
PUERTA ABIERTA
Fuentes policiales explicaron a Europa Press que fue el hombre abatido el que dejó la puerta abierta dejando la casa a oscuras. Los agentes accedieron al inmueble por el pasillo cuando el agresor se abalanzó hacia los agentes con el arma blanca.
Así logró acuchillar a uno de los agentes en el tórax, muy cerca de la clavícula, cayendo al suelo. Las mismas fuentes exponen que el chaleco que portaba el agente fue clave para que la herida no fuera mortal, dado que logró parar en parte la puñalada.
En el caso del segundo policía, se le tiró al cuello y le generó un corte muy profundo en la zona facial. Ante la agresividad del hombre y para evitar que el ataque continuara, el agente que estaba en el suelo hizo uso de su arma reglamentaria y efectuó dos disparos, que causaron la muerte de este hombre prácticamente en el acto.
Además, fuentes policiales han explicado a Europa Press que el hombre abatido era de origen magrebí y contaba con múltiples antecedentes por malos tratos y quebrantamiento de condena. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska; y el director general de la Policía Nacional, Francisco Pardo Piqueras, han hablado con los agentes heridos para desearles "una pronta recuperación".
