La Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB) capturó y sacrificó a principios de mes 923 palomas en la plaza de Catalunya por el riesgo sanitario que suponían para la Feria de Consumo Responsable que allí se celebra, pese a que el Ayuntamiento se comprometió hace un año a no sacrificar nuevos ejemplares y optar por medios menos cruentos. RD