El Ministerio de Sanidad contrató los 659.000 test defectuosos para el diagnóstico del coronavirus por un total de 17,1 millones de euros a través del laboratorio farmacéutico Interpharma, empresa que asegura haber devuelto ya el importe "íntegro" abonado por el Gobierno.

En un comunicado, este laboratorio farmacéutico asociado a Farmaindustria y proveedor del Sistema Nacional de Salud (SNS) explica que adquirió los test a través de la empresa china Shenzhen Bioeasy Biotechnology, que contaba con licencia para exportar a la UE.

"Dada la situación de emergencia y urgencia y la escasez de estos productos en el mercado, se bloqueó la mayor partida posible para garantizar el suministro futuro, en previsión de que estos test pudiesen ser una buena alternativa para la detección precoz del covid-19 y se enviaron las primeras partidas, que serían testadas", indica el comunicado.

Tras recibir los primeros lotes, el Gobierno español hizo sus comprobaciones y estimó que los test no ofrecían los resultados esperados.

"Cuando nos fue comunicada esta situación se procedió al abono íntegro del importe satisfecho en virtud del acuerdo, asumiendo esta compañía todos los costes generados por el suministro y aún antes de haber recibido los lotes de test suministrados", asegura Interpharma.

Plataforma de contratación del sector público

El coste total de estos 659.000 test ascendía a 17.143.885 euros, según figura en la plataforma de contratación del sector público y el contrato contemplaba cuatro entregas y un primer pago del 35 % del total del pedido, cuyo importe ascendía a seis millones de euros, mientras que el resto de pagos se realizarían durante las entregas parciales en un plazo máximo de 24 horas.

Según consta en este portal, el pasado 8 de abril, y tras recibir las dos primeras entregas, el Ministerio de Sanidad envió un burofax a Interpharma en el que le informaba de que después de realizar los correspondientes estudios de fiabilidad de los test suministrados, la sensibilidad de estas pruebas era "muy inferior" a la que indicaba la validación clínica (más de 80 % de sensibilidad y 99 % de especificidad).

Por ello, Sanidad rechaza los test y le reclama a Interpharma la recuperación del precio satisfecho hasta la fecha, que ascendía a 6.998.035 euros.

Según la documentación publicada en la plataforma de contratación, el 17 de abril tiene lugar el reintegro de esta cantidad por parte del laboratorio.