El temporal que ha azotado a casi toda España en los últimos días remite y se despide con el mes de febrero, pero deja tras de sí mucha preocupación en el norte de España por la evolución del caudal de los ríos.
Cantabria es una de las comunidades autónomas que peor lo han pasado en los últimos días por el peligro constante de desbordamiento generado por lluvias incesantes y la acumulación de nieve, con inundaciones de carreteras, calles, garajes, locales y viviendas en varios municipios.
Aunque el gobierno regional ha desactivado ya el Plan Territorial de Emergencias que iniciaron la madrugada del domingo en su nivel 1, los daños de la crecida de los ríos han reabierto el debate sobre la limpieza y conservación de las cuencas fluviales.
El consejero de Presidencia y Justicia, Rafael de la Sierra, ha anunciado hoy que elaborará un análisis detallado para trasladarlo a la Confederación Hidrográfica del Cantábrico y que ésta adopte medidas. El Ayuntamiento de Torrelavega ya ha encargado un informe técnico sobre los estropicios debidos a la crecida de los ríosSaja-Besaya y varios arroyos del municipio que, junto con otros afectados como Puente Viesgo, Piélagos Corvera o Santiurde de Toranzo, evalúan ahora la petición de ayudas para hacerles frente.
En el País Vasco, el Departamento de Seguridad también ha desactivado hoy su plan especial de emergencias tras remitir las lluvias, pero sigue muy pendiente de la cuenca del Zadorra, en Álava, por el desembalse del pantano de Ullibarri. Las fuertes precipitaciones en el entorno del Zadorra generaron problemas en localidades como Durana, Trespuentes, Yurre, Villodas o Iruña de Oca e incluso anegaron parques en el barrio de Abetxuko en Vitoria.
El sindicato agrario UAGA se ha sumado a la exigencia a las administraciones para que optimicen la capacidad hidráulica de los cauces y eviten inundaciones porque "es inadmisible que el sector primario tenga que hacer frente todos los años a las consecuencias de las riadas", según un comunicado.
El viento también ha hecho de las suyas en distintos puntos de España y, así, el Ayuntamiento de Huesca ha cerrado esta tarde el parque Miguel Servet ante las rachas de hasta 65 kilómetros por hora, mientras en Cádiz sigue anulada la conexión del servicio de catamaranes entre la capital gaditana y Rota, aunque se ha reabierto el servicio con El Puerto de Santa María.
Aunque el tiempo mejora, la tregua no durará mucho pues la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) anuncia la llegada de nuevas precipitaciones al tercio norte peninsular el próximo miércoles. Esta misma tarde ha advertido del peligro de aludes en losPicos de Europa, peligro que será "fuerte" por encima de 1.800 metros y "notable" por debajo de esa altitud, debido a la nieve acumulada durante el pasado fin de semana.
Un riesgo que tardará al menos 48 horas en estabilizarse y ya ha provocado algunos desprendimientos en la carretera de acceso a la localidad cántabra de Sotres, en el concejo de Cabrales, según ha confirmado el Servicio de Emergencias del Principado.
Los más de 80 centímetros de nieve acumulada en la zona fueron precisamente la trampa en la que perdieron la vida dos mujeres de 51 y 41 años el sábado pasado, mientras practicaban senderismo por la Tinença de Benifassà, en el interior de la provincia de Castellón, junto a un hombre de 50 que fue rescatado con vida aunque continúa ingresado en el Hospital General de Castellón. Las fallecidas eran montañeras experimentadas y conocían la zona y una de ellas era socia del club de montañismo La Pedrera mientras que él era socio fundador del club Piolet, pero el temporal no les dio opción.
Mejor suerte han tenido las 82 personas, 15 de ellas menores de edad, que fueron evacuadas la pasada madrugada de un refugio del puerto madrileño de Cotos, donde quedaron aisladas después de que la nieve interrumpiera la línea de cercanías de Renfe que cubre la ruta Cercedilla-Navacerrada-Cotos. Los menores, uno de ellos un niño de 2 años, junto con una mujer de 54 con hipertensión, fueron rescatados por un grupo de cuatro todoterrenos del Plan de Viabilidad Invernal y otros dos del Grupo Especial de Rescate en Altura de la Guardia Civil apoyados por quitanieves.
El resto del grupo esperó hasta que hacia las tres de la madrugada un tren de socorro trasladó al grupo a Cercedilla después de que las máquinas despejaran el metro y medio de nieve que cubría las vías. Como no hay mal que por bien no venga, hay que señalar que las malas condiciones meteorológicas han hecho bajar cerca de un 10 % la factura eléctrica en estos primeros meses del año respecto al mismo período de 2015 para un consumidor medio acogido a la tarifa regulada o precio voluntario al pequeño consumidor.
Y es que la cantidad total a abonar está determinada en buena medida por la evolución de los precios de la electricidad en el mercado mayorista, y éstos han bajado gracias al aumento del viento, que ha incrementado el volumen de la energía eólica, y de las lluvias, que han elevado la producción hidroeléctrica.
