Científicos españoles han desarrollado un nuevo test genético que, solo analizando la saliva, predice el riesgo de sufrir un infarto de miocardio a diez años vista tras una investigación que ha seguido seis años a 52.000 pacientes de entre 30 y 74 años con distintos grados de riesgo cardiovascular. El estudio se publica en Circulation: Cardiovascular Genetics.