La portada de la revista 'Time' del próximo 20 de marzo vuelve a tener formato gif en internet y al presiente de EEUU de protagonista. 'Trump's war on Washington' lleva por título el nuevo número y el reportaje central que firma Massimo Calabresi. En la cubierta, un Trump distraído y de dimensiones mastodónticas se apoya en el obelisco blanco del Monumento a Washington, que se resquebraja mientras él, impasible, continúa tuiteando con un solo dedo.

La revista señala que el pasado 4 de marzo Donald Trump declaró la guerra en contra del Gobierno. A través de Twitter acusó al expresidente Barack Obama de ordenar que le espiasendurante la campaña electoral de noviembre del pasado año. 'Time' explica que Trump acusó a Obama de un acto que podría llevarlo a un juicio político, sugirió que agentes del departamento de Justicia pudieron estar involucrados en el delito y que había la posibilidad de que jueces federales hubieran permitido el escándolo. Llegó, incluso a comparar los hechos, con el 'escándalo Watergate'.

ACUSACIONES SIN PRUEBAS

"Ni él ni su equipo en la Casa Blanca han proporcionado ninguna prueba de sus extraordinarias acusaciones", escribe Calabresi. "Pocos, o ninguno, de los presidentes que le precedieron han prestado menos deferencia por los jefes ejecutivos y legisladores que estuvieron antes que él", prosigue, antes de citar a uno de los estrategas de Trump, Stephen Bannon, que ha reconocido que el objetivo del presidente era la "deconstrucción" del Estado administrativo.

LA PORTADA DEL CAOS

El pasado mes de febrero la revista también sorprendió con otra portada animada dedicada a Donald Trump [por cierto, persona del año 2016, según la misma revista]. Entonces, el presidente trataba de guardar las formas mientras una tormenta azotaba en el Despacho Oval, arrastrando documentos y descolocándole la corbata y hasta su famoso flequillo dorado. 'El caos en la Casa Blanca' fue el título de aquel número con imagen del artista Tim O'Brien. Tras el viento huracanado, un mensaje: "Aquí no hay nada que ver". Como en este número de marzo, aquella rápidamente se viralizó en la red con miles de retuits.

'Time' explicó con otro tuit cómo se les había ocurrido hacer una ilustración así, y cómo se la encargaron al ilustrador O'Brien, autor también de otras cubiertas famosas de la publicación, como la de Osama Bin Laden o el papa Benedicto XVI.