Bruselas mueve ficha para financiar el Pacto Verde con el que transformar energética, económica y medioambientalmente la Unión Europea (UE). El plan, propuesto ayer, aspira a movilizar «un mínimo de un billón de euros» en inversiones sostenibles durante la próxima década a partir del presupuesto de la UE, inversiones privadas y el Banco Europeo de Inversiones para convertir a Europa en el primer continente climáticamente neutral.

Como elemento central del plan, un nuevo mecanismo de transición justa concebido para apoyar a las regiones más dependientes de los combustibles fósiles e impedir que ninguna se quede atrás. Se trata de un método diseñado para convencer a los países de Europa central y del este más reacios con la neutralidad de carbono en el 2050, la gran prioridad de la CE para impulsar la transformación energética, económica y medioambiental de la UE y que Polonia rechazó en la última cumbre.

Este nuevo mecanismo permitirá generar al menos 100.000 millones de euros entre el 2021 y el 2027 través de tres vías. La primera, un fondo de transición justa dotado con 7.500 millones. A este montante, se sumarán entre 30.000 y 50.000 millones de euros de los fondos estructurales y de cohesión y el instrumento se completará con la movilización de 45.000 millones en inversiones privadas a través del programa Invest EU.