Quien se perdió la visión de la última superluna, la más intensa de las últimas décadas, tiene la última oportunidad del año este miércoles 14 de diciembre, cuando se producirá una muy similar, aunque su luminosidad será algo menor que la de este martes,13. La Luna no se acercará a la Tierra tanto como la última vez, pero la diferencia será lo suficientemente pequeña como para que resulte imposible distinguirla ni siquiera en el caso de haberla inmortalizado fotográficamente.

DÓNDE VERLA BIEN

Para disfrutar de este espectáculo natural, sin ser ideal desde la ciudad de Barcelona, podrían ser buenos puntos la sierra de Collserola, el Carmel o el Guinardó. No obstante, para verla bien desde Catalunya un buen enclave pueden ser la sierra del Montsec, en el límite de las comarcas del Pallars Jussà y la Noguera. Más suerte tendrán los que puedan observarla desde las cumbres de Tenerife; la isla de Lobos, en Las Palmas, y el mirador de San Nicolás, uno de los lugares más visitados de Granada.

Las superlunas se producen porque la órbita del satélite alrededor de la Tierra no es estrictamente circular, sino un poco elíptica, lo que provoca que en algunas ocasiones se encuentre más cerca, el llamado perigeo, o más lejos, el apogeo. Si coincide con la fase exacta de Luna llena, entonces el espectáculo astronómico está garantizado. Cada año hay unos 12- 13 ciclos lunares, de los cuales entre 3 y 5 forman superlunas porque coinciden con el perigeo.