Posible solución contra la plaga de jabalís. Salt (Girona) ha iniciado una prueba piloto en la lucha contra la plaga de cerdos silvestres que afecta también a las comarcas castellonenses. El Ayuntamiento de dicha localidad ha puesto en marcha, junto con la empresa Soma SL, un plan para evitar la presencia de jabalís en el casco urbano basado en dos barreras, una electrificada y otra olfativa con feromonas de lobo.
Las nuevas medidas, presentadas ayer, se pondrán en marcha de forma inmediata ya que el consistorio recibe cada mes una veintena de denuncias de la presencia de jabalís, y en la batida que se hizo hace 15 días se localizaron 12 ejemplares.
Uno de los objetivos municipales con el nuevo método es poder disminuir las batidas, que en estos momentos son bastante frecuentes, y frenar los daños que causan los jabalís en las 400 huertas de las Deveses de Salt.
La concejal de Entorno Natural y Medio Ambiente, Marta Guillaumes, explicó que la barrera tendrá una longitud de 2.800 metros y que está situada donde han detectado los pasillos que usan los jabalís para acceder a las huertas. Guillaumes también recordó que los jabalís «son un problema» y que con el uso de barreras ecológicas buscan que, «a través del aprendizaje, los jabalís dejen de entrar en las huertas».
En este caso, los animales asocian el olor de su principal depredador --el lobo-- con la experiencia desagradable de recibir una descarga eléctrica cuando entran en contacto con los hilos del vallado. Este pastor eléctrico solo será activado por las noches, que es cuando los jabalís llevan a cabo su máxima actividad.
Durante el día, coincidiendo con la presencia humana y de animales domésticos, la valla dejará de funcionar.
Por su parte, algunos expertos en el sector señalan que, a pesar que la mejor opción para hacer frente a la plaga de jabalís es sumar diferentes métodos de hacerle frente, con estas medidas no se ataca el problema de raíz. Consideran que es muy importante que se sigan haciendo batidas y que en ellas se eliminen hembras, porqué así se frena la alta reproducción de esta especie.
OTRAS MEDIDAS // Apuntan que sería necesario que se desbrozara la zona, para que los ungulados no se sintieran tan a gusto encontrado en este lugar cobijo, comida y sin ningún depredador.
En cuanto a las dos medidas presentadas ayer, consideran que tendrán escasos resultados y durante poco tiempo, porque los jabalís aprenderán a saltar o burlar la electrificación y, como son animales muy inteligentes, acabarán deduciendo que por más que huela a lobo, este no aparece.
La prueba abarca todo el perímetro que delimita las huertas de esta población gerundense. Durante cuatro semanas se hará un seguimiento para ver el funcionamiento y comprobar la efectividad del nuevo sistema.
