Si hay una enfermedad que causa pavor entre los padres esa es la meningitis. El pánico a una dolencia que puede causar secuelas muy graves o incluso la muerte ha llevado a dos de cada tres familias a adquirir la vacuna que protege contra el meningococo B, comercializada bajo el nombre de Bexsero, pese a que cuesta 106 euros la unidad y se requieren dos o tres dosis en función de la edad del niño. En total, un desembolso de como mínimo 200 euros, que puede llegar a superar los 1.000 en familias numerosas.

Sin embargo, el gran interés mostrado por los padres --también en Castellón, como publicó Mediterráneo-- y la intensa campaña que la Asociación Española de Pediatría está llevando a cabo para que se incluya en el calendario vacunal común y sea financiada por el Sistema Nacional de Salud no han hecho mella en el Ministerio de Sanidad y la mayoría de las comunidades autónomas, como es el caso de la valenciana. La Comisión de Salud Pública, en base al informe elaborado por el comité técnico asesor, decidió no incluir el Bexsero porque «muestra una corta duración en la inmunización, no protege a la población no vacunada y no hay datos de su efectividad».

Todas las autonomías han seguido la recomendación de los técnicos, salvo Canarias y Castilla y León, que han anunciado que la incluirán en la financiación pública.