A día de hoy, si un extranjero entra en Italia por motivos laborales, puede permanecer como máximo una semana y sin cuarentena. Los millares de italianos repatriados o en fase de serlo sí que han tenido que pasar dos semanas de aislamiento. Hasta el 1 de junio ningún extranjero puede entrar en el país por turismo. Lo que suceda después no ha sido aún aprobado, porque según el Gobierno debe ser una decisión concertada en el marco de la UE, para aplicar criterios homogéneos. Por esto, las autoridades y el sector prevén que los clientes de estas vacaciones sean italianos. R. DOMÈNECH