El presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, ha encargado la apertura de dos investigaciones para esclarecer porqué tres alcaldes de la comunidad se vacunaron contra el coronavirus de forma "irregular", en palabras del propio presidenet. Los ediles han mantenido que lo hicieron porque "sobraron dosis" y "se lo ofrecierion. Una situación similar ocurrió en Riudoms (Tarragona) aunque en este caso nadie ha investigado lo ocurrido.

En los municipios alicantinos de El Verger y Els Poblets, los alcaldes socialistas Ximo Coll y Carolina Vives se vacunaron la semana pasada de coronavirus, a pesar de no formar parte de los colectivos a los que va dirigida. Ambos se defendieron afirmando que habían sobrado algunas dosis, que fueron enviados a los centros de salud para abastecer al personal sanitario. Pero el primer alcalde en vacunarse sin estar previsto fue el socialista de Rafaelbunyol (Valencia), Fran López, durante el primer día de la campaña de vacunación, que sostuvo que le ofrecieron una dosis y no se lo pensó. Ha sido el único que ha rectificado. "Igual no fue la mejor decisión", ha afirmado.

Tras conocerse el caso de los alcaldes alicantinos, la Consejería de Salud valenciana ha abierto una investigación en esos dos departamentos de salud. Pero además la Consejería de Igualdad también va a investigar por qué en la residencia de Rafelbunyol se permitió el acceso "a una persona ajena" a la plantilla o a los proveedores, los únicos que tienen permitido entrar.

El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha afirmado que cuando acabe la investigación "se tomarán las decisiones oportunas", una vez se determine "qué ha pasado y quiénes han sido los responsables de una actuación absolutamente minoritaria y absolutamente irregular". Puig ha insistido en que este tipo de situaciones "son menores", pues ya se han administrado más de 80.000 vacunas en la Comunidad Valenciana.

Más contundente ha sido la vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra. Ha aseverado que la vacunación de estos alcaldes "no tiene ninguna justificación", y la ha calificado de ser un "reproche social". "Aquí no sobran vacunas y nadie se puede saltar la cola", ha añadido. El comportamiento de los ediles también ha acarreado críticas de Ciudadanos y del PP. Estos últimos han pedido su dimisión.