La Policía Nacional y la Guardia Civil han desmantelado en Castellón una célula de narcotraficantes que formaba parte de una macroorganización dedicada a introducir en Andalucía hachís, procedente de Marruecos, por vía marítima para, posteriormente, cruzar España y exportar el estupefaciente a Italia y el centro de Europa en dobles fondos de camiones y furgonetas.

En total, los investigadores han detenido a 24 personas (10 de ellas en Castellón) y han intervenido más de tres toneladas de droga, siendo interceptado en Vinaròs un alijo de 700 kilos.

Según han confirmado a Mediterráneo fuentes del operativo, los investigadores han detenido a seis personas en Vinaròs, cinco hombres de nacionalidad española y una mujer rumana; y a otras cuatro en Nules, dos varones marroquís y dos españoles. Todos ellos eran integrantes de la banda, organizaban las paradas en la provincia de los vehículos que transportaban la droga y también se encargaban de conducirlos con el hachís.

PARTE LOGÍSTICA / Los arrestados disponían de locales de grandes dimensiones en los que manipulaban los fardos de hachís y ocultaban la droga para sacarla de España. Los agentes sorprendieron a los detenidos en Vinaròs con un camión cisterna, que transportaba 700 kilos de hachís escondidos en su interior.

El vehículo pesado venía del sur del país, flanqueado por dos coches lanzadera, que realizaban labores de vigilancia, abriéndole paso al camión e informando a su conductor de posibles controles policiales en la carretera.

Los detenidos en la capital del Baix Maestrat son, precisamente, el conductor del camión cisterna y los dos cómplices que circulaban en los turismos lanzadera.

Además, hay otras tres personas, vecinas de Vinaròs, que se encargaban de la parte logística del traslado, al igual que los tres vecinos de Nules arrestados.

Además de la droga, los investigadores han intervenido 11 vehículos en toda España, 3.300 euros en efectivo y diverso material de comunicación, utilizado para realizar los traslados de la droga. A los arrestados se les imputan delitos contra la salud pública, pertenencia a organización criminal, falsificación de placas de matrículas y contra la seguridad del tráfico.

INICIO DE LA OPERACIÓN / La investigación comenzó el pasado mes de marzo, después de la aprehensión de 1.368 kilos de hachís, en varios alijos, en playas de las provincias de Málaga y Cádiz, donde también se detuvieron a varias personas. Los narcotraficantes transportaban la droga en lanchas desde Marruecos y, posteriormente, guardaban los fardos en inmuebles de Andalucía para organizar los traslados. H