El Tribunal Supremo ha confirmado la condena de 15 años de prisión de la Audiencia Provincial de Castellón para un hombre que violó durante seis años a la hija menor de la que era su pareja, bajo la amenaza de que mataría a su madre. Los hechos llevaron a la víctima al suicidio cuatro años después de decidir denunciar.

Los abusos se remontan al 2007, cuando la niña tenía diez años, y se extendieron hasta el 2013, momento en el que la menor decidió revelar las agresiones que le provocaron un trastorno por estrés postraumático crónico con ideación autolítica (pensamientos suicidas). Finalmente, en enero del 2017, tras cuatro años de procedimiento, la víctima se suicidó y no llegó al juicio oral.

Ahora el alto tribunal confirma la condena de la Audiencia Provincial por un delito continuado de agresión sexual a una menor de 13 años con acceso carnal y prevalimiento, por la que le impuso además libertad vigilada 10 años y la obligación de indemnizar a la madre de la víctima con 40.000 euros. El Supremo no solo no cuestiona los hechos probados de la sentencia, sino que asegura que estos «no dejan lugar a dudas sobre lo acontecido».

El condenado, que solía recoger a la menor en el colegio y la llevaba a la academia, a su casa o a su alquería, abusó de ella durante seis años, obligándola a realizarle felaciones bajo amenazas de dañar a su madre.