El atracador de la Plana, que mantuvo en vilo la provincia en primavera, fue ayer condenado a 23 años y medio de prisión por el Juzgado de lo Penal nº 2 de Castellón tras alcanzar un acuerdo su abogado defensor y la Fiscalía antes de que se celebrara el juicio.

Diego Armando León Carriel, de nacionalidad ecuatoriana y de 31 años, cometió seis asaltos, armado con un cuchillo, en gasolineras de Almassora, Burriana, Nules y Benicàssim. Asimismo, protagonizó un séptimo robo con violencia e intimidación en el bar Mediterrànea de Almassora. Todos sus golpes los llevó a cabo entre el 15 de abril y el 2 de mayo de este año, causando una gran alarma social en las comarcas de la Plana Baixa y Plana Alta.

PENA

El delincuente reconoció ayer los hechos y aceptó la pena de cárcel pactada por seis robos con violencia e intimidación y un séptimo delito de hurto, según consta en el acuerdo al que ha tenido acceso Mediterráneo. No fue necesaria la declaración de más de una decena de testigos, guardias civiles y policías nacionales.

El primero de los asaltos lo cometió el 15 de abril en la gasolinera Monoil de Almassora. Amenazó a una trabajadora con «rajarla» y se llevó 300 euros.

Al día siguiente, acudió a la gasolinera Galp de Burriana, donde volvió a mostrar el arma blanca a la empleada, apoderándose de 330 euros. En días posteriores, regresó a esos mismos establecimientos de Burriana y Almassora, y asaltó, asimismo, la estación de servicio Tena Cepsa de Nules y la BP de la N-340, en Benicàssim.

El susodicho dio sus golpes con un Audi A4 robado en Burriana y, tras su detención, intentó escapar de los calabozos del cuartel de la Guardia Civil, golpeando a uno de los agentes, como publicó en exclusiva este rotativo.