Domingo R.L., el hombre de 59 años acusado de asesinar a Antonio Valls, el primer alcalde de la democracia de Ribesalbes, es penalmente responsable de sus actos y se enfrentará a un jurado popular en el juicio que se celebrará en la Audiencia Provincial antes de que acabe el año.

Y es que, aunque los médicos han determinado que sufre un trastorno con rasgos paranoides y otro de la afectividad, distingue, según concretan los expertos, entre el bien y el mal, que es la circunstancia que ley estipula como necesaria para que una persona tenga responsabilidad penal y pueda ser juzgada y, si fuera oportuno, condenada.

El auto de apertura de juicio oral, que dictó el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Nules este martes, es el último paso de la instrucción del caso.

La Audiencia Provincial deberá señalar la celebración del mismo en el calendario y las partes redactar los correspondientes escritos de defensa y acusación, en los que ya se especificarán los años de condena que la Fiscalía y la acusación particular solicitan para el acusado. Un dato que por el momento se desconoce.

Domingo R.L. permanece, desde que fuera detenido en agosto del año pasado, en prisión provisional. Así lo determinó la magistrada del Juzgado de Instrucción número 6 de Castellón, que estaba de guardia cuando el acusado se personó en la comandancia de la Guardia Civil de Castellón y confesó que había atropellado voluntariamente a la víctima. Dos días antes, Antonio Valls caminaba por el arcén de la CV-189, a la entrada de Ribesalbes, cuando fue arrollado por la espalda.

TRÁGICO FINAL // El hombre cayó malherido al suelo, donde, presuntamente, fue agredido en la cabeza con una piedra, que le causó un aplastamiento en el cráneo, como adelantó Mediterráneo. Posteriormente, fue evacuado por aire al hospital valenciano La Fe, donde murió poco después de haber ingresado muy grave. La autopsia al cadáver reveló que tras el atropello alguien quiso rematarlo en el suelo. H