Nuevo caso de homofobia en la provincia. Dos jóvenes fueron agredidos en Peñíscola por portar una de ellos una pulsera con los colores del arco iris, identificativos del colectivo LGTBI.

Los gais recibieron insultos, mofas, puñetazos y patadas por parte de un grupo formado por otros jóvenes quienes asaltaron a las víctimas profiriendo gritos contra su condición sexual, denunciando publicamente los hechos, según ha sabido Mediterráneo. Con esta nueva agresión ya son tres las incidencias graves de las que ha tenido noticia el Colectivo LGTBI Queer Fest de Castellón este año frente a una denuncia hecha publica en el 2017. «Se calcula que solo se denuncian o se tiene conocimiento de un 20% de las agresiones que ocurren, generalmente por miedo a visibilizarse o exponerse», dicen.

Dicho colectivo, apoyándose en los datos arrojados por el Observatorio Valenciano contra la LGTBIfobia, indican que «este año se ha producido un repunte en los delitos de odio contra las personas LGTBI, un incremento que el observatorio fija en un 20% respecto al año 2017».

DENUNCIAR // Queer Fest recuerda lo importante que es denunciar y visibilizar las agresiones. «En la denuncia hay que aportar un parte de lesiones a la hora de efectuar el trámite, así como intentar memorizar los insultos verbales o improperios que se hayan producido». «También se deben ofrecer datos precisos sobre el aspecto o rasgos identificativos de los agresores, para facilitar su identificación o vinculación con grupos violentos», señalan.

«Estas agresiones se producen en época de repuntes turísticos», recuerdan desde el colectivo LGTBI Queer Fest.