Un taxista de Castellón no podía ni imaginar lo que le esperaba cuando recogió a un joven en la estación de tren de la capital, que acabó detenido tras amenazarlo de muerte, poniéndole un cristal en el cuello. El trayecto, que resultó ser una auténtica pesadilla, comenzó con la tranquilidad de cualquier servicio. Un hombre, de 28 años y nacionalidad española, bien vestido y de comportamiento normal, paró al conductor, sobre las 16.30 horas, y le pidió que lo llevara hasta un centro comercial de las afueras.

El taxista así lo hizo y, cuando se encontraban a mitad camino, el cliente cambió de opinión, indicándole que quería ir al Barranquet. El conductor se negó y el joven sacó un trozo de cristal que escondía entre su ropa y se lo colocó en el cuello, amenazando con cortarle si no hacía lo que él le decía. Entonces, le obligó a dirigirse hacia el grupo Perpetuo Socorro para comprar droga y, una vez hubieron llegado, atracó al taxista, pidiéndole que le diera dinero de su recaudación.

Según ha podido saber este diario, la víctima le dio únicamente 20 euros, presuponiendo que lo quería para adquirir sustancias estupefacientes en la zona y que aceptando darle algo, se marcharía. Así fue. El joven cogió el dinero y salió huyendo a la carrera.

De inmediato, el taxista llamó al 091, dando una descripción física del joven lo más ajustada posible. Los agentes iniciaron un dispositivo de búsqueda y tan solo 15 minutos después lograron dar con el atracador, que se había cambiado de ropa para intentar despistar a la policía, y arrestarlo en la carretera Almassora. Según han confirmado a Mediterráneo fuentes del caso, el detenido cuenta con antecedentes. H