Manuel Mustieles, un vecino de Onda de 34 años, no daba crédito el miércoles por la tarde, sobre las 20.00 horas, cuando su coche se prendió fuego mientras circulaba por la CV-17, a la altura de Castelló. Una avería provocó que del turismo comenzara a salir humo de forma repentina y, en cuestión de segundos, el vehículo se vio envuelto en unas voraces llamas que lo calcinaron.

Su propietario pudo salir ileso y, cuando el fuego comenzó a avanzar sin control no solo temió por el estado del coche, sino también por el anillo de compromiso que ocultaba en el maletero y con el que iba a pedir matrimonio a su pareja y madre de su hija de seis meses, Melisa Rodríguez.

A la llegada de los bomberos y la Policía Local, estos sofocaron las llamas lo más rápido que pudieron. «Fue todo muy rápido. Cuando vi que salía humo del motor, me paré en el arcén y llamé al seguro. En pocos minutos, el coche estaba carbonizado», explica el afectado a este diario. Las altas temperaturas elevaron la presión de los neumáticos, que explotaron durante el incendio. Del coche saltaron también plásticos y trozos de metralla, como explicaron fuentes policiales a este diario.

Manuel les comentó a los agentes la importancia de la joya que guardaba en el interior y que había ocultado allí para que su novia no la descubriera por la casa familiar.

Cuando los efectivos abrieron el matero, descubrieron que la joya había resistido a las altas temperaturas y estaba intacta. El fuego había devorado todo el vehículo menos la sortija.

Los bomberos y policías no pudieron resistirse a una historia tan curiosa y compartieron el suceso en las redes sociales, un hecho que obligó ayer a Manuel a cambiar sus planes. «Iba a pedírselo el sábado que es su cumpleaños, pero voy a adelantarlo», dice el ondense, quien sorprenderá a su chica con estas líneas en Mediterráneo y una pregunta que no olvidará.

¿Responderá ella que sí? ¿Comerán perdices?