Un cadáver ha emergido esta tarde en la playa de Xilxes ante la mirada de decenas de turistas y veraneantes. Se trata de un hombre que lleva un bañador de rayas y de unos 60 años, informaron algunos testigos a Mediterráneo. Fuentes cercanas al caso han confirmado que podría tratarse de un bañista de Burriana que habría desaparecido hace dos días.

En estos momentos está la Guardia Civil y la Policía Judicial, así como la Policía Local en el lugar a la espera de que llegue el juez para proceder al levantamiento del cadáver. Esta sería la víctima número nueve en lo que llevamos de verano en nuestras costas.

El primer caso se dio el Peñíscola, el 20 de junio, cuando un turista de 83 años perdía la vida mientras se bañaba. En julio, un menor de 15 años moría también Peñíscola después de darse un fuerte golpe contra las rocas. A finales de julio un buzo, de 54 años, sufría un paro cardíaco en Orpesa: y el 31 de julio un turista aragonés, de 74 años, perdía la vida en Morro de Gos. El 7 de agosto un madrileño de 75 años moría en el Voramar de Benicàssim y el día 15 de agosto un senegalés, de 26 años, se ahogaba en Heliópolis. Era el primer día que se bañaba y no sabía nadar. El 19 de agosto un ucraniano de 65 años moría en la playa de Morro de Gos de Orpesa, después de introducirse en el agua con la bandera roja. Los socorristas lo encontraron ya flotando en el agua, fallecido.

Durante el verano del 2016 fueron seis las personas que perdieron la vida cuando disfrutaban de la playa.