La Policía Nacional detuvo en València a una mujer como presunta autora de un delito de homicidio imprudente después de la muerte de su bebé, de 35 días, que no inscribió en el Registro Civil, no recibió la atención adecuada ni, al parecer, asistencia médica tras haber dado a luz.

Los hechos investigados se produjeron a finales del pasado año, concretamente en el mes de noviembre, según confirmaron diversas fuentes policiales.

En aquel mes, agentes de la Policía Nacional acudieron a un domicilio del distrito de Abastos de la capital valenciana, donde un bebé de 35 días yacía muerto y sin que, por tanto, los servicios sanitarios pudieran hacer nada por él. En ese momento, solo pudieron comunicar su defunción.

A raíz de las pesquisas policiales, se descubrió que el pequeño no había sido inscrito en el Registro Civil ni se había atendido a la mujer en el parto en ningún centro hospitalario. Asimismo, el recién nacido había sido alimentado con comida no adecuada para su edad y, según parece, tampoco lo había explorado un médico durante sus primeros días de vida, algo muy poco habitual.

Por todo ello, se arrestó a la madre --una mujer de 32 años de origen congoleño--, que hasta la fecha no ha reclamado el cuerpo del bebé, que se encuentras en el Instituto Anatómico. La detenida, con antecedentes policiales, ha pasado a disposición judicial, según las mismas fuentes.